Estacan conflictos economía de Tula

Los conflictos sociales, la pandemia y la inundación del año pasado son los factores por los que la economía de Tula sigue estancada, señaló Juan Carlos Olguín Monroy, presidente de la asociación Projardín.

De acuerdo con el líder de al menos 200 vendedores de la plaza principal de la demarcación, los problemas en la cementera Cruz Azul y la refinería Miguel Hidalgo influyen.

“No salíamos de la pandemia y se nos viene la inundación, con los daños a la ciudad y el cierre obligado de comercios… ahora, como si no fuera suficiente, tenemos conflictos en dos de las industrias más importantes”, indicó.

Aseveró que el bloqueo de plazas en la refinería y el paro de la cementera, tras el ataque que sufrió hace una semana, representan una “catástrofe financiera” para la región, pues los trabajadores dejan de recibir sus salarios y no compran en los comercios.

Al desplome de ventas del 30 por ciento, dijo, se suma el pago de rentas, que van de los 8 mil a 45 mil pesos, así como costear los servicios básicos.

Reconoció que varios negocios del jardín Constitución y de todo el primer cuadro han tenido que cerrar en definitiva por la falta de recursos.

“Ya que los comerciantes se han visto obligados a rascarse con sus propias uñas: los que no tienen ahorros o no venden mucho, se han visto forzados a cerrar”, lamentó.

El líder de los comerciantes apuntó que esperan tener un “ligero repunte durante la venta de productos el próximo 10 de mayo, Día de la Madre”, entre otros festejos del mes.

Miguel Ángel Martínez | Tula de Allende